YA ESTA, DIJO CACHITAS
Otro dicho, que se introducía mucho dando
como zanjado el asunto, se le atribuía a un señor de oficios varios. En el
pueblo se le tenía como peón para todo, y que yo recuerde, al menos, durante
una temporada larga estuvo de vaquero, (pastoreando reses para carne), obrero
para faenas agrícolas sobre todo en verano, trabajos varios para el
ayuntamiento, la fabricación de materiales de construcción (léase hacer adobes)
por encargo y en ocasiones, pidiendo puerta por puerta por los pueblos
cercanos, con su compañera de fatigas, pareja de hecho sin papeles y hambre
asegurada para ambos, de apodo CACHITAS él y GEÑA ella y me supongo que
tendrían nombre propio, pero nadie lo usaba. Resultó que un buen día que se
encontraba atareado en la fabricación de adobes (ladrillo de barro mezclado con
paja, sin cocer, y secado al sol) pasó por el lugar su padre y se enzarzaron en
una acalorada discusión que fue ascendiendo de tono, llegando el final de
la misma cuando el hijo agarró un adobe, se lo lanzó a su padre y le acertó, al tiempo que decía, “ya está”.
Por eso, la gente cuando algo queda por fin concluido cita la frase, “ya está,
dijo Cachitas”y con la coletilla a continuación “y había pegado un adobazo a su
padre”.
Construcción típica de adobes y detalle