viernes, 15 de julio de 2022

Viva la Virgen del Carmen

 

¡¡¡Viva la Virgen del Carmen!!!

¡¡¡ Vivaaa !!! 

Es María, con Jesús en brazos portando la corona, los hábitos de la cofradía y el escapulario. Pero todos decimos nuestra Virgen del Carmen.

Pequeñita, pero es tan bonita...

Es la patrona, de Torresandino y la imagen más venerada de los cascones. Las fiestas en su honor se celebran según la costumbre muy arraigada aquí y en otros muchos pueblos y ciudades de España. Por todo el mundo se repite esta advocación del 16 de julio.

El ambiente es el de grandes fiestas con pregón, romerías, comidas de fraternidad, espectáculos, atracciones para todas las edades, pero sobre todos los actos prevalece la misa mayor concelebrada y la procesión por las calles del pueblo con la venerada imagen en su bella carroza acompañada de autoridades, vecinos y foráneos. Mención especial el grupo de danzas regionales y dulzaineros local que nos deleitan con su saber hacer y a los sones de la música, decenas de voluntarios salen delante de la comitiva para bailar la jota tradicional, avanzando de espaldas para no dar la espalda a la imagen entre vítores a la Virgen.

¿Por qué todos la llamamos Carmen, Virgen del Carmen, Ntra. Señora del Carmen? ¿Por qué no María, Virgen María?

Proviene del monte Carmelo en Tierra Santa, hoy el actual Israel entre el Mediterráneo y el valle Jezreel. Allí se instalaron unos eremitas en el siglo XIII que veneraban a Sta. María y a mediados de siglo construyeron la primera iglesia dedicada a ella y fundaron la orden de los carmelitas. El día 16 de julio de 1251 se le apareció la imagen al superior de la misma, San Simón Sock, el cual le añadió el sobrenombre de Stela Maris (Estrella de los mares). La aparición dio lugar a que se popularizase como Santa María del Monte Carmelo.

Así fue como se pasó a denominar la Virgen del Carmen. A día de hoy se sigue celebrando en esa misma fecha y son muchos los que ponen a sus hijas o hijos: Carmen, Carmelo o Karmele. Obviamente, a los niños el fervor les viene desde la cuna.

Los misioneros españoles llevaron la devoción a América cuando la colonización, por eso se celebra esta festividad por varios países de ultramar desde el siglo XVI.

También es la patrona de marinos pescadores y de todos los hombres que viven del mar. De la Armada española lo es desde 1901.

El escapulario de la Virgen del Carmen identifica a quien lo lleva como perteneciente a una orden, la del Carmen y debe estar bendecido por un sacerdote. Es un signo externo que distingue a quien es seguidor de la devoción mariana, de color marrón y lleva en un lado la imagen de la Virgen y del otro el corazón de Jesús. Pero sin duda todos los de este pueblo, cofrades o no, la sienten como su protectora, sienten orgullo de tenerla como patrona y la llevan en el corazón.

 

¡¡¡Viva la Virgen del Carmen!!!