EN CLAVE DE HUMOR
ANTAÑO Y OGAÑO
Antaño, los padres preocupados por el progreso de su retoño en la escuela, de vez en cuando preguntaban al maestro:
Qué me dice del chaval. ¿Vale pa’estudiar? Que si no se aplica, me lo llevo a arar.
No va mal no, pero le cuesta lo suyo porque se esfuerza poco.
Bueno pues palo, que la letra con sangre entra.
Al día siguiente:
Papá, mamá, el maestro me ha pegado con la regla.
Mira niño, ya me tienes harta. !Plís plás! Toma, un par de sopapos más para que espabiles, que me vas a matar a disgustos.
Calla ya niño, deja de llorar o me quito la zapatilla. ¿Te duele? Más me duele a mí.
Cómo ha cambiado la vida en sólo medio siglo transcurrido desde entonces.
Ogaño, los pequeños y pequeñas de apenas diez años se amotinan en clase, le zurran al profesor, hacen manifestaciones en contra del docente y arman un gran complot en su contra hasta conseguir que le sustituyan. Los papás se reúnen en la AMPA y elevan una queja al director exigiendo que el maestro sea expedientado. Pero a los niños que nadie ose tocarles.
Antaño los adolescentes querían destacar y veían una posibilidad de hacerlo ante el sexo opuesto desplazándose sobre una flamante moto.
Mamá, yo quiero una moto.
Yo no soy tu criada si eso es lo que quieres, se lo pides a tu padre.
Papá, cómprame una moto.
Ni moto ni mota, hijo. ¿Te has creído que soy el Banco de España? Pues te equivocas y el dinero no crece en los árboles.
Jo papá tengo amigos que la tienen, no entiendo por qué tú no me la compras.
Porque lo digo yo y punto.
Te prometo que sacaré el curso sin problemas.
Anda, déjame en paz, lo hablaré con tu madre.
Las madres siempre tienen la última palabra y las de aquella época tenían salida para todo.
Tú eres el padre y lo que digas se hará, pero es la primera vez que me siento en todo el día, podíamos decirle que colabore más en el hogar y tal vez tendría una recompensa.
Vale mujer, encárgate tú de ello.
¿Que estás cansado? ¡Anda no me tomes el pelo, que te...que te... que te...! Para salir de fiesta nunca lo estás. Ya tengo ganas de que te eches novia y te largues de una vez.
Pero me vas a ayudar con papá o qué.
¿Acaso hablo en chino? Anda tontorrón, que haré lo que pueda.
Ogaño los chavales se alinean con las nuevas tecnologías y muestran más interés por conseguir la Play, la Tablet, el teléfono móvil o el ordenador y se pasan horas siguiendo mensajes por Whatsapp o jugando con la pantalla en vez de hacerlo con amigos.
LA FAMILIA NUMEROSA
En muchos hogares el elevado número de hijos desbordaba a los cabezas de familia, que para restablecer el orden tomaban decisiones salomónicas que de paso resultasen instructivas:
1.-Imponiendo respeto por un trabajo bien hecho.
Si os vais a matar salid fuera, que acabo de fregar el suelo.
2.-Fomentando el hábito a la oración.
Reza para que esa mancha salga de la alfombra.
3.-Acatamiento a la jerarquía establecida.
Cuando seas padre, comerás un huevo.
4.-Un buen razonamiento, corto y conciso.
Porque lo digo yo y punto.
5.-Lo que es la ironía.
Si no te callas vas a llorar por algo.
6.-Paradigma de previsión.
Hija lleva siempre la ropa interior limpia por si acaso.
7.-Lección de odontología.
Como vuelvas a contestarme te estampo los dientes contra la pared.
8.-Promoviendo el ahorro.
–Guárdate las lágrimas para cuando yo muera.
9.-Introducción a la biología.
Tienes menos sesos que un mosquito.
10.-Supervivencia.
No cuentes tus penas, los buitres se abalanzan sobre los animales heridos.
DIVERTIDOS SINÓNIMOS DE DIVERTIDO
Fantástico: Era un joven muy influenciado en los pensamientos religiosos orientales. Sin ser budista admiraba las técnicas Zen y la disciplina Tao. En el trabajo lo hacía todo zentao y se lo tomaba con mucha karma.
Sandunguero: Oiga, dígame usted que trabaja en la morgue ¿Cree que después de la muerte hay una vida mejor?
Depende de la muerte de quién sea.
Guasón: Papá, ¿es verdad que en algunas culturas la mujer no conoce al marido hasta que se casa?
Eso pasa en todas partes hijo.
Jocoso: Le dice Puri a Paco, su esposo: Hoy para cenar, sobras.
Y este responde: Que sepas Puri, que tú a mí tampoco me haces falta.
Hilarante: Imagínense a una joven en un baño público, sin apoyar el culo, sujetándose con una mano en la pared, la otra en la puerta y el bolso en los dientes.
Ocurrente: No te deseo ningún mal pero ojalá que cuando te pintes las uñas te empiece a picar el culo.
Feliz: El covid sigue activo, lo diferente es que ya tenemos permiso para salir a buscarlo.
Placentero: Si no quieres renunciar a tus sueños, sigue durmiendo.
Distraido: Dice tu hijo que la cisterna pierde.
Dile que lo importante es participar.
Risueño: Antes llegaba el fin de semana y lo daba todo por salir, ahora lo doy por no salir.
Chistoso: El amor tocó a mi puerta una vez y yo estaba paseando al perro.